noviembre 08, 2010

§Drabble//Dolor§

Título: More than us
Capítulo: 10 "Dolor"
Fandom: Los tres mosqueteros/20 años después
Claim: OC/D’artagnan

Título: “Dolor”
Resumen: El engaño es una espina que nos llega al corazón.
Notas: Este Drabble fue parte de un desahogo personal...

“Dolor”

El tiempo para D’artagnan fue muy lento y a la vez ausente. Todo sucedía a una velocidad que jamás había ido, las cosas pasaban frente a sus ojos, la madre de Cosette se presentó muy amablemente y Cosette se fue a su habitación para cambiarse de ropa.

¡Que diferente se veía! Ahora era más bella de lo que había visto antes D’artagnan.
Las acciones eran lentas, pero se le pasaban tan rápido que no se percataba de lo que sucedía en realidad. Su cerebro no sabía qué hacer y decir, parecía que alguien más había llegado con un disfraz de mosquetero y un florete en el cinturón, no decía nada, inclusive no sentía nada.

Cosette tenía esa opresión en el pecho, se sentía culpable y a la vez desesperada. Su madre no la apartaba de su lado, no tenía ni una oportunidad de ir al lado de D’artagnan y hablar, mucho menos de aclarar las cosas.

Se sentó en el sillón, la madre de Cosette parecía una buena mujer de mediana edad, joven para ser la madre de Cosette, pero con rasgos duros que marcaba la experiencia obtenida con los años.

- ¿Se queda a cenar con nosotras, Teniente? – preguntó la señora y D’artagnan lo negó.
- Yo ya he cumplido con mi misión y… - Encontró la mirada de Cosette – y ya no tengo a qué más quedarme.
- Teniente, concédame el capricho de que nos acompañe. Le estoy muy agradecida por traer a mi hija sana y salva.

D’artagnan volvió a mirar a Cosette, tenía angustia y desesperación en los ojos, no podía dejar que D’artagnan se fuera así y la dejara. Pero tampoco le podía suplicar que se quedara.

- Jamás me he podido negar a la compañía de tan bellas damas. – Cosette suspiró de alivio y D’artagnan por primera vez, desde que cruzaron la puerta de la casa de la condesa, sintió. Sólo que necesito salir al coche, temo que dejé ahí un paquete que me pertenece.

Hizo una reverencia y salió.

John le dijo como llegar a la caballeriza y se condujo solo. Una vez ahí dio un grito de desesperación y coraje. ¡Lo había engañado! ¡Lo engañó! No le había dicho nada y él… él que había sido tan honesto con ella, ya tenía los planes listos para irse juntos, había pensado hasta en casarse. Golpeó un madero para tratar de sacar el coraje que tenía su alma, la furia de sentirse humillado, engañado. Ella se había burlado de él ¿Y porqué no? Era sólo un mosquetero tonto que cayó en las garras de aquella bella flor que hasta ahora le mostraba las espinas.

Los caballos relincharon cuando D’artagnan lanzó un pedazo de madera contra el coche en el que había viajado, en el que se habían entregado, maldijo una y otra vez y al final…

Al final lloró al darse cuenta de que la amaba demasiado.

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